La pasadera del agua o puente de tablas

¿Sabías que….?

La pasadera del agua o puente de tablas

En el año 1852, el particular, D. Juan de Dios Govantes y Valdivia, había llevado a cabo una conducción desde Tomares a Triana, y a través de ella surtía una fuente con veintidós caños, situada en un local, en los números 4 y 6 de la calle Betis.

Pero esto era totalmente insuficiente, por lo cual, en el año 1885 la empresa de abastecimiento de aguas de Sevilla ( Seville Waterworks company limited ) solicitó al Ministerio de Fomento permiso para poner tuberías sobre el puente de Triana, para llevar agua potable y de riego desde Sevilla hasta Triana.

La epidemia de cólera declarada el 15 de julio de ese mismo año, hizo posible que se autorizara de forma provisional la instalación de la tubería, para el suministro de agua sobre el puente de Triana.

El día 7 de diciembre de 1885, el Ayuntamiento y la empresa de aguas de Sevilla, firmaron un acuerdo para construir una pasadera para el paso de las tuberías y de los peatones. Se acordó abonar a partes iguales los gastos que ascendían a 175.000 pesetas.

El 29 de abril de 1887, el ingeniero director de la compañía de aguas, D. Carlos Arturo Friend Itirriell, elabora un proyecto para unir la Plaza de París ( hoy Plaza de Armas) con la de Chapina en Triana.

Pero el ingeniero de caminos D. Luis Moliní Ulibarri, encargado por el Ayuntamiento para supervisar dicho proyecto, lo rechaza por no ajustarse a la Ley de obras públicas. Y así, entre nuevas modificaciones sin rechazo, se llegó al 9 de noviembre de 1893 ( habían pasado 6 años)cuando por fin el proyecto recibe luz verde.

El 3 de septiembre de 1895 se adjudica en segunda subasta, después de haber quedado desierto en la primera, la adjudicación de la obra, a D. Ignacio Marianello y Mota, director de talleres Zorroza, por la cantidad de 289.000 pesetas.

La pasadera se terminó el 14 de abril de 1898 y se inauguró después de las pertinentes pruebas de resistencia, el 23 de abril de 1898, La pasadera fue desguazada a finales de los años cincuenta, del siglo XX, al entrar en servicio la estación del Carambolo.

Angel Bautista Guerrero

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