Un puente con historia

El puente de Isabel II o Puente de Triana -como es conocido popularmente-, cruza el río Guadalquivir uniendo el centro histórico de Sevilla con lo que eran los arrabales de la ciudad, el actual barrio de Triana.

Se construyó en sustitución de un puente hecho a base de barcas y es el puente de hierro más antiguo conservado en España.

Construido sobre bases de piedra, debió rehabilitarse en varias ocasiones. En 1977 el tablero del puente se sustentó mediante otro sistema distinto al del apoyo en sus arcos y tímpanos los que, no obstante, fueron conservados gracias a la constancia ciudadana y a una acertada intervención rehabilitadora y conservadora, que mantuvo los originales.

Admirado y fotografiado desde todos los ángulos posíbles, no deja indiferente a nadie. Es un puente con personalidad propia, es “El Puente de Triana”

 

Detalle del bajo del puente

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