Diccionario trianero_18

Altozano, plaza del.- De esta plaza que se abría ante la embocadura del puente de barcas, se tienen noticias desde el siglo XIII. Lugar estratégico inmediato a la fortaleza, fue transformándose en el corazón de Triana, su fuerza motriz existencial. Con la construcción del puente de Isabel II, en lugar porticado, medievalesco, con Cruz de humilladero para cultos de vecinos y rezos de caminantes, hizo adecuado su espacio para función de mentidero y ágora comercial que fue su principal característica de uso, levantándose lo que se llamó la «Torre del Reloj», un pequeño oratorio para la imagen de la Virgen del Carmen que se hallaba hacia la mediación del puente de barcas y una casa-tienda con visos de «alcaldía» que daban al lugar categoría de Plaza Mayor.

Altozano, Triana
Una vista del Altozano antes de la construcción de la farmacia de Enrique Murillo

El Altozano fue escenario de sucesos de todo tipo. Fue sitio de proclamas y hasta de ajusticiamientos como señala este fragmento de crónica antigua: «Juan Moreno en 19 de abril de 1603 fue ahorcado en Triana por una muerte y pr otros delitos el mayor de los cuales fue en Triana. Era éste un moro muy inquieto y valentón. Salió toda Sevilla y Triana a verlo y murió con muchas muestras de salvación». Sobre el Altozano se sucedieron manifestaciones populares relacionadas con situaciones bélicas; así en 1596 se puso en estado de alerta ante el peligro «del inglés» que había atacado Cádiz, emplazándose piezas de artillería en medio de los gritos y llantos de los que creían llegado el fin del  mundo. Curioso preludio a una batalla que no se dio.

Aquí, en el Altozano, se hicieron fuerte los franceses en plena retirada de Sevilla, y en este mismo lugar reforzaron sus defensas los que creyeron defender unos derechos en unos derechos en los amargos días de julio de 1936. En esta plaza se vitoreó y vituperó al mismo personaje (Fernando VII) según la circunstancia; por el Altozano entraron en la ciudad reyes y otros grandes personajes y fue siempre pulso abierto al ánimo del barrio.

Altozano, Triana
Altozano. La modernidad llegó a Triana con la Exposición del 29

Se dijo que su nombre le viene por haber quedado a salvo sus vecinos de los efectos de una grave epidemia: «Alto-sano», pero es notorio que su denominación proviene de su forma geológica de terraza fluvial. Tras las profundas remodelaciones de los años veinte, cercana la Exposición Iberoamericana, la plaza presentaba su mejor aspecto urbano, mereciendo el «mirador trianero», en el decir de don Santiago Montoto, o la»plaza del sol de Triana», como la denominara el célebre reportero «Galerín». Admirada, en verdad, el trasiego de gentes y vehículos, dominado por la deslumbrante gracia arquitectónica de la Capillita nueva y el reloj del edificio «El Faro».

Digamos, por último, que el ancho enclave es testigo anual de la algarabía con que el personal despide y saluda los años a golpes de uvas y tragos de champán, y es también soporte para el tablado de los festejos de la Velá de la Patrona.

Continuará

Ángel Vela Nieto

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