A JESÚS NAZARENO
Sí, Padre Jesús Nazareno,
tu Nombre todo lo dice:
eres el Hombre más bueno
que sólo en el mundo existe
tan Humano y tan Moreno.
Canastilla perfumada
y de mil claveles llena,
guarda la Pasión callada
de una Estampa Nazarena
que los ángeles tallaran.
Se encendieron los faroles
para un Cristo Nazareno,
y se llenaron de flores
todos aquellos senderos
para pasar tu Dolores.
Cuando con silencio sales
a tu Real de Castilla,
iluminando la calle
con las puntas encendidas
va un rosario de ciriales.
Entre Sangrantes Sudores
cargas tu sólo esa Cruz,
¡Ay! Señor de mis amores
dame un poco de Luz
para sentir tus Dolores.
Cuando te veo pasar
año tras año lo mismo,
pienso que muero al pensar
como vas hacia el abismo
callado con tu Pesar.
Y en tu lento caminar
entre Triana y Sevilla,
el Puente que en medio está
un año más, maravilla
tu Divina Majestad.
Pasada la madrugada,
ya de vuelta entre tu gente,
continúa maltratada
esa Soberana Frente
con las espinas clavadas.
Padre Jesús Nazareno,
voy a llenarte de lirios,
que con aromas de Azahar,
y candelas de tus cirios
puedan así mitigar
un poco de tu Martirio.
Santiago Martín Moreno
Foto: Jesús Daza
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