Homenaje a Manolo Marín

Homenaje a Manolo Marín de sus amigos.

Que Triana siempre será Triana, a pesar de los ataques que ha sufrido y sufre, se comprobó, como tantas veces, anoche en la puerta de la casa del maestro de baile Manolo Marín, hermosa casa que hoy luce una de esas señales en cerámica que avisan de la singularidad de los sitios, y este costado de la ciudad universal tiene para forrar sus calles. Justo homenaje a quien ha formado a los que ya son también maestros en materia tan nuestra como el baile flamenco. Manolo es parte del paisaje cotidiano de este barrio, vive y convive con esa carga de sencillez que le caracteriza, y aunque ya fue nombrado «Trianero de Honor» faltaba el refrendo del cariño que se le tiene. No acudió nadie en representación de la Tenencia de Alcaldía que fueron invitados, ellos sabrán y, por supuesto, que lo sentimos porque nuestra intención era que presidieran el acto. Pero nos juntamos los amigos y, entre ellos, el concejal Curro Pérez acompañado de quien fuera su brazo derecho en Triana, Manolo Alés. Luego, el hermoso patio de Rodrigo de Triana, vía que el maestro convirtió en «la calle del baile», se hizo escenario para el arte que discurrió en riadas de palmas, cantes, bailes, copas y risas… Triana. Y quien no la entienda peor para él.

Ángel Vela Nieto

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Fotos y vídeos: Elisa Melado