
Para saber quién era, baste esta grabación. No se puede condensar más arte, más gracia, más Triana que la que aquí se nos muestra.
Anoche, la calle San Juan lloraba. Un abrazo oscuro ahogó en dolor la cava de los gitanos y con su daga hendió las sombras de las herrerías. Se escucharon soplidos de fuelle y trin trin, tran, martinetearon los yunques.
Su prima Lole, canta:
Orilla del río,
las lágrimas que lloraba
iban a la orilla del río,
cómo no sería mi llanto
que el Guadalquivir vi crecío.
Orilla del río, orilla del río,
donde se fueron
los suspiros míos.
Diario de Triana