Triana cuna de artistas: El Mani

Luis Moyano, el Mani, nació a mediados de los años 20 y vivió en el corral del Cisne. Gitano delgado y de pelo claro era hijo de El Tumba de Triana. Bailó con la gracia de su padre que no era poca y era genial por bulerías. Estuvo entre los flamencos más solicitados de la Cava de cuantos se dedicaban a cantar y bailar en fiestas.

Fue El Maní un artista completo que murió joven atacado por la tuberculosis.

Crónica trianera…

Antonio Díaz-Cañabate en su «Historia de una tertulia» (1952) cuenta que estando en la Venta Antequera con un grupo de amigos entró, invitado por taurinos, en un reservado donde, en plena juerga de señoritos, estaba El Maní. No es generoso ni fino de expresiones el famoso escritor refiriéndose al que él llama Manín… «El Manín es un gitano de edad indefinida, lo mismo puede tener cuarenta años que dieciséis. Va vestido con un mono azul y fuma una colilla llena de saliva. El Manín es un gitano repugnante, que también los hay. No sé cómo canta pero su voz bronca, aguardentosa, agria, no augura exquisiteces». Así de «simpático» va creando su relato de la fiesta. Con El Maní está su hermano El Tumbilla, Tragapanes y Manuel Maera. Naturalmente a Díaz-Cañabate no le gustan los fandangos de «El Manín» por mucho que lo jaleen los presentes; ve con ojos esaboríos al gitanillo y lo manifiesta con toda la crudeza necesaria para llamar la atención en este capítulo del libro con la «lírica humorística» que se le reconocía. Tampoco está generosos con los demás artistas, sólo pasa la mano ante Maera al que, no obstante, le ve cara de enfermo. Podría decirse que el escritor madrileño se comportó como un «señorito» pasado de vino, prepotencia y desprecio.

 


Fuente: Del epígrafe dedicado a El Maní en «Triana, la otra orilla del flamenco» de Ángel Vela Nieto

 

 

Sé el primero en comentar

Dejar una contestacion