Una exposición en Triana repasa la importancia de la cerámica en los lienzos de Murillo

cerámica, Murillo, lozas barrocas,

La primera teniente de alcalde y delegada del Distrito Triana, Carmen Castreño presentó este viernes la exposición ‘Lozas barrocas. La cerámica en los lienzos de Murillo’, que se celebra en el Centro Cerámica Triana hasta el próximo 3 de junio.

‘Lozas barrocas. La cerámica sevillana en los tiempos de Murillo’ se celebra en colaboración con la UIMP y es la primera muestra del cuarto centenario que cruza el río. “Queremos que el pintor esté presente en toda la ciudad”, ha declarado Carmen Castreño. La Federación de Artesanos de Sevilla, presente en la inauguración, devuelve el homenaje del pintor barroco a su oficio a través de un catálogo de piezas que pueden adquirirse en museos y en Casa Murillo. “Gracias a la obra del maestro podemos conocer la cotidianeidad y los enseres de las familias de la Sevilla del XVII”, declara la comisaria, Eva Díaz Pérez.

La primera teniente de alcalde y delegada del Distrito Triana, Carmen Castreño, ha presentado este viernes la exposición ‘Lozas barrocas. La cerámica en los lienzos de Murillo’, que se celebra en el Centro Cerámica Triana hasta el próximo 3 de junio. La propuesta, realizada en colaboración con la Universidad Internacional Menéndez Pelayo (UIMP), propone un recorrido por uno de los aspectos menos conocidos del maestro, las piezas de artesanía que figuran en buena parte de su producción pictórica.

Al acto también han asistido la comisaria de la exposición y escritora Eva Díaz Pérez, la directora de la UIMP, Encarnación Aguilar, y la presidenta de la Federación de Artesanos de Sevilla, Ángeles Terán. La muestra exhibe reproducciones de los cuadros del artista en los que aparecen bodegones de cántaros, cantarillas, pucheros, jarras, alcarrazas, platos, pocillos y escudillas. Los paneles se acompañan de piezas que emulan las que aparecen en los lienzos, trabajadas por el alfarero Álvaro García, que las ha producido a la manera en la que se fabricaban en el siglo XVII. El objetivo es que el público conozca cómo eran esas piezas a las que Murillo otorgó tanto protagonismo y que conocemos gracias a sus pinturas, pues muchas de ellas no se usan en la actualidad.

Durante su intervención, Carmen Castreño ha destacado el papel de Murillo como reportero gráfico de la producción artesana del XVII. “Tras el éxito del arranque expositivo de Año Murillo, queríamos que el pintor estuviera presente en otras zonas de la ciudad y en espacios menos predecibles a través del diálogo con otras artes, como sucede con el gran programa de teatro y danza que acabamos de presentar, y también con esta exposición en la que Murillo cruza el río para instalarse en uno de los barrios con mayor tradición de ceramistas”.

Aunque Murillo no fue un pintor de bodegones, ha ampliado Castreño, es notable el valor que en sus escenas costumbristas, e incluso en las bíblicas, otorga a las naturalezas muertas, con especial presencia de la alfarería sevillana. “Gracias a esta obsesión del pintor conocemos la relación de las familias de la Sevilla del siglo XVII con estos enseres, muchos en desuso en nuestros días”, ha aportado Castreño.

La delegada del Distrito Triana ha recordado la importancia de hacer hincapié en el homenaje que también los artesanos sevillanos del siglo XXI están dedicando al maestro, sumándose, bien a través de la Federación de Artesanos de Sevilla (FAS), bien desde iniciativas privadas, a la celebración del cuarto centenario.

En efecto, como ha explicado la presidenta de la FAS, esta institución elaboró para la efeméride un catálogo de piezas artesanales que pueden adquirirse tanto en Casa Murillo como en el Espacio Santa Clara. Pero, además de este muestrario oficial, ha insistido Castreño, un paseo por los comercios de la ciudad nos devuelve una idea de la cantidad de ceramistas, pintores, orfebres, diseñadores… que de forma independiente están inspirándose en Murillo para crear sus productos. “Todo ello redunda en la idea de que la ciudad entera está festejando al genio del barroco, y de que ese ambiente de celebración trasciende las calles del centro para llegar a todos los barrios, a través del esfuerzo colectivo de las instituciones públicas y privadas”.

Según la comisaria, Eva Díaz Pérez, a través de estas piezas descubrimos “un excepcional apunte sobre la vida cotidiana de entonces, como si Murillo nos sirviera de guía para pasear por las cocinas del pasado y los talleres de alfarería de Triana en su época”. Cuando la también escritora preparaba la documentación histórica de su novela ‘El color de los ángeles’, le otorgó gran importancia al descubrimiento de los detalles de la vida cotidiana. “Me di cuenta de que sólo observando los cuadros, uno podía descubrir cómo eran las casas de la época. Otra muestra de la excelencia de Murillo como pintor del natural. La idea que se nos ocurrió para la exposición fue señalar algunos de estos cuadros y dirigir la mirada del espectador a ese detalle de los bodegones de lozas que aparecen en rincones, al pie de los personajes, en mesas o incluso como centro de la escena. Y luego intentar que esas piezas adquirieran realidad y que, de alguna forma, salieran del cuadro viajando desde el siglo XVII y los pinceles de Murillo a las vitrinas del Centro Cerámica de Triana. En cierto modo ha sido casi un trabajo en 3D que parte de los lienzos del pasado hasta nuestra realidad”.

El responsable de pasar las lozas de Murillo a la tridimensionalidad ha sido el artesano Álvaro García, que ha logrado trabajar con un barro similar al de la época, siguiendo las técnicas del barroco y empleando las mismas bases para los esmaltes. “He logrado los tamaños originales de cada pieza con mediciones realizadas a partir de las escalas de los cuadros de Murillo”, ha explicado.

Una serie de conferencias completan y contextualizan el significado de estos bodegones barrocos en el mundo artístico del pintor: por qué incluía las cerámicas, las técnicas pictóricas o el significado que tenían en las escenas religiosas o profanas. La muestra está dividida en cinco bloques: la presencia de estas piezas en la vida diaria del pasado, la alfarería del agua, la cerámica en las escenas religiosas, el barro en la arquitectura y la cerámica vidriada. La propuesta explica de manera práctica las diversas técnicas de decoración utilizadas en la época barroca: cuerda seca, cuenca o arista y azulejo pintado (sobre cubierta lisa o “técnica pisano”).

Las reproducciones de los cuadros que sirven como guía ilustrada del mundo de la cerámica a través de Murillo son: ‘Santas Justa y Rufina’ (h. 1665-1668, Museo de Bellas Artes de Sevilla), ‘Rebeca y Eliezer’ (h. 1655, Museo del Prado), ‘Fray Francisco y la cocina de los ángeles’ (h. 1645-1646, Museo del Louvre), ‘San Diego de Alcalá dando de comer a los pobres’ (h. 1645-1646, Museo de la Real Academia de Bellas Artes de San Fernando) y ‘Jacob bendecido por Isaac’ (h. 1660, Museo Estatal del Hermitage de San Petersburgo).

Por su parte, la directora de la Universidad Internacional Menéndez Pelayo, Encarnación Aguilar Criado, ha manifestado que tanto la muestra como el ciclo de conferencias son un ejemplo de la colaboración que existe entre su universidad y el Ayuntamiento. “El objetivo de la actividad es poner en relieve un aspecto muy interesante de la pintura de Murillo como son las escenas de populares de la vida cotidiana de los sevillanos del siglo XVII, pues gracias a sus lienzos el visitante puede descubrir el papel que estos enseres tenían en su tiempo dentro de los hogares sevillanos”.

La presidenta de la Federación de Artesanos de Sevilla, María Ángeles Terán, ha señalado que numerosos artesanos de la ciudad, bien desde la institución que preside, bien desde la iniciativa privada, se están sumando a la celebración del maestro a través de productos de cerámica, bisutería, cristal… “Para Año Murillo elaboramos un catálogo de piezas que pueden adquirirse en las tiendas oficiales de la efeméride y que están funcionando muy bien. Se trata de ver a Murillo desde los ojos de un artesano del siglo XXI”. Desde 1993 la FAS reúne un importante número de artesanos de la ciudad y mantiene una colaboración constante con el Ayuntamiento. “Gracias al Gobierno de la ciudad estamos presentes en tiendas del Alcázar, de museos locales y de centros del ICAS, donde vendemos nuestros productos inspirados en maestros como Murillo”.

Sobre la UIMP

La Universidad Internacional Menéndez Pelayo (UIMP) es hoy una red de sedes dependiente del Ministerio de Educación, Cultura y Deporte que tiene en Santander el grueso de su labor, aunque esta sede convive con otras nueve que mantienen un elevado nivel de actividad. La UIMP de Sevilla, fundada en 1983, posee una amplia oferta académica y cultural que se concentra, principalmente, en los Cursos de Primavera y Otoño y en los de Inmersión en Lengua Inglesa. La misión de la UIMP es difundir la cultura y la ciencia, fomentar las relaciones de intercambio e información científica y cultural de interés internacional e interregional y el desarrollo de actividades de alta investigación y especialización. Para más información, visite la web www.uimp.es.

Más información sobre los horarios de la exposición y el programa de visitas guiadas aquí.

Sé el primero en comentar

Dejar una contestacion