En Triana, no sólo han nacido artistas del toreo, flamenco, copla o grandes virtuosos de la cerámica. También son de las cavas, gitanos y civiles, indistintamente, muchos futbolistas, unos béticos, mayoría aplastante, y otros sevillistas. No voy a entrar ahora, en afirmar que Triana es verdiblanca, eso es una tontería mayúscula. No, no he contado nunca, ni pienso hacerlo en absoluto, a la población residente en este excepcional barrio.
Con lo bonito que es el derbi andaluz por antonomasia, Real Betis Balompié-Sevilla Fútbol Club. El previo, el encuentro en si, y el desenlace posterior. La guerra dialéctica entre “verderones” y “palanganas”, da igual el resultado del partido, unos se reirán de otros durante dos semanas, pero esa es la salsa del fútbol. La prensa de la capital, cada vez que hay un Madrid-Barça, es el partido del año, conocido como el clásico. Yo creo, opinión particular, que los periodistas deportivos capitalinos, nunca han vivido un derbi sevillano.
En el barrio alfarero, han nacido, o solamente han residido largos periodos de tiempo, grandes figuras del balompié hispano. Vuelvo a repetir, no me meto en eso, ni siquiera me importa, pero casi todos, se criaron en Heliópolis, aunque también hay algunos de Nervión. Pero esto no es más que una simple anécdota.
En primer lugar, tenemos que nombrar al Calavera Foot-ball Club, nacido en 1928 y jugando sus encuentros en Campo de La Residencia Universitaria Salesiana. Este equipo estableció un vínculo de filiación con el Betis desde 1934 a 1936, siendo la Guerra Civil la que lo cortase de raíz. Desde 1942 a 1972, nació el Triana CF, que en 1957 se afilió con el Real Betis Balompié. En 1963 se inauguró el Campo de los P.P. Salesianos de Triana, que era de albero. Anteriormente jugaban en el Campo de Tablada. Esa misma campaña, bajo la presidencia de Alfonso Jaramillo, consigue el ascenso a Tercera División. Si no me equivoco, desde 1917, ya que Jaramillo afirmó en su día: “El Triana balompié ya existía desde mi niñez. Permaneció sin competir algunos años, pero federativamente siempre existió”.
Anteriormente a este, el popular barrio del arrabal sevillano, vio nacer durante la década de los años treinta gran cantidad de clubs que llegaron a participar en competición federada, como la Gimnástica de Triana FC, Esperanza de Triana FC, UD Trianera, Athletic Club de Triana, Agrupación Recreativa Triana, FC Triana, AD Balompédica Trianera, UD Voluntad, Colspe (Colegio San Pedro), CD Montecarlos, CD Ademar, CD San Gonzalo o el Fabié (desde muchos años atrás).
A groso modo, puedo señalar que del barrio de El Tardón han salido los dos “Joaquines” verdiblancos, Parra y Petit, más los sevillistas Gervasio Salas y Emilio Pintado. En 1941 fichó por el Sevilla FC, el internacional Pedro Alconero procedente del Barakaldo CF. Se instaló en El Tardón, hasta que fallecido en 1963. Los béticos Paco Telechía y Javier López, autor de los dos goles que dieron al club la primera Copa del Rey en 1977, se casaron con dos chicas de este barrio. De la barriada de El Carmen era Pepe Cristo, Antonio Viqueira o el escurridizo Dani Martín, protagonista de la Copa de 2005. Los tres han pertenecido al Betis. La esposa de Romo, fino centrocampista verdiblanco de los ochenta, es nacida en El Carmen.
En el contiguo barrio León, nació la perla del fútbol trianero, Joaquín Sierra Quino y el guardameta Paco Toledo, sobrino del mítico Guillermo Eizaguirre, también arquero del Sevilla FC y seleccionador nacional en el Mundial de Brasil’50. De el barrio Voluntad eran los hermanos Liz, Manuel y Antonio, ambos sevillistas.
En Santa Cecilia está el sevillista José Luis Ruda y, actualmente, el bético Antonio Reyes que, aún habiendo nacido en el barrio de La Macarena, sale de nazareno en la madrugá del Jueves Santo. De San Vicente de Paúl está Cano, que fue jugador de la cantera del Sevilla FC.
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